José María Dupuy (1881-1973), hijo del cofundador de la
ciudad de Miramar, ingreso en 1910 a Prefectura General de Puertos, fue Jefe de
la Ayudantía de Miramar entre los años 1912 a 1930.
En esa época se produjeron en las playas de Miramar
significativos descubrimientos paleontológicos y arqueológicos, por parte de Lorenzo
Parodi y de Carlos Ameghino (hermano de Florentino) junto a otros científicos
del momento. Dupuy, desde un primer momento, se convirtió en un entusiasta
aficionado a esa rama de la ciencia y buscador de restos en las playas de Miramar,
logrando en esa tarea, hitos muy importantes en su aporte a la ciencia
argentina, a saber:
1916- Hallazgo de los restos de una nueva especie de tapir
prehistórico del Cuaternario bonaerense, al cual Carlos Ameghino bautiza como
"Tapirus Dupuyi”, en homenaje a su descubridor.
1917- Encuentra varios restos fósiles asociados entre sí,
los cuales constituyen los huesos de un Hippidium, un primitivo caballo
americano del Pleistoceno.
En la época, además, construye el primer museo
paleontológico de Miramar, en el mismo local de la Ayudantía y se le encarga,
oficialmente, al personal de Prefectura, la custodia de los yacimientos en
Miramar.
1925- Dupuy descubre los restos de un perezoso gigante del
pleistoceno, bautizado como Glossotherium. Es trasladado al museo de la
capital.
1926- Junto a Lorenzo Parodi, diseccionan y procesan los
restos de una ballena varada en las playas. Este cetáceo, de unos 26 metros de
largo, está hoy exhibido en el Museo de Ciencias Naturales de Buenos Aires.
1928- Descubre los restos fósiles de un Gravigrado, especie
de mamífero gigante.
Tapirus Dupuyi , fue una especie de mamífero perisodáctilo extinto de la familia de los tapíridos y del género Tapirus que vivió en el Pleistoceno de América del Sur.
Tapirus Dupuyi , fue una especie de mamífero perisodáctilo extinto de la familia de los tapíridos y del género Tapirus que vivió en el Pleistoceno de América del Sur.
Esta especie fue descrita originalmente por Carlos Ameghino
en 1916, empleando como base materiales fragmentarios colectados en sedimentos
del Ensenadense en la ciudad de Miramar, provincia de Buenos Aires, cuya
especie homenajea a José María Dupuy, prefecto local y coleccionista en
ciencias naturales.
Un amplio estudio de todos los materiales colectados en los
yacimientos fosilíferos de América del Sur referidos al
género Tapirus llegó a la conclusión que es una especie dudosa por la
falta de material fósil, al igual que Tapirus australis, Rusconi, 1928.
Este taxón, como cualquier integrante del género Tapirus, se asocia a
climas cálidos, y ambientes de pluviselvas, sabanas o bosques húmedos de tipo
tropical o subtropical cercanos a ríos o pantanos; con dieta herbívora hojas,
frutas, etc.
Era un animal de tamaño mediano, con una longitud que
variaba desde 1,8 metros hasta los 2,5 metros, y un peso de 220 a
300 kilogramos. Sin embargo, la principal característica
del tapirus es su alargado hocico en forma de pequeña probóscide, que
usa principalmente para arrancar las hojas, hierbas y raíces que constituyen su
alimento.
Sobre la base de análisis morfométricos de sus dientes se
llega a la conclusión de que Tapirus rioplatensis es
significativamente mayor que Tapirus terrestris, Tapirus
mesopotamicus, y Tapirus rondoniensis, y algo más grande que otros
grandes tapires fósiles o vivientes, tales como Tapirus
oliverasi, Tapirus indicus, Tapirus tarijensis, y Tapirus
haysii.